Storytime real: El cliente que no devolvió el traje… y por qué no nos quita el sueño

Hoy es viernes. Y mi mamá está preocupada. Un cliente alquiló un conjunto hace una semana… y no lo ha devuelto. No contesta llamadas, no escribe, no da señales. El traje sigue en sus manos.

¿Qué hacemos? ¿Nos angustiamos? ¿Nos desesperamos? No. Porque esto, aunque suene raro, ya estaba contemplado desde el principio.

🧠 Nuestro modelo de negocio lo previó

Desde que comenzamos, sabíamos que podía pasar. Por eso, cada traje que alquilamos tiene un costo de adquisición que se cubre con el primer alquiler. Si el cliente decide no devolverlo, no perdemos el traje: ya está pagado. Lo que se pierde es tiempo, atención, traslado, servicios… pero no el activo.

Y lo más importante: no es lo común. Es la excepción. La mayoría de nuestros clientes alquilan porque tienen un evento puntual. No quieren comprar un traje para guardarlo todo el año en el clóset. Quieren resolver, verse bien, y seguir con su vida.

🎯 El traje como solución, no como carga

Por eso nuestro negocio funciona. Porque entendemos que la ropa formal no tiene que ser una inversión permanente. Puede ser una solución temporal, accesible y útil. Y si alguien decide quedarse con el traje… bueno, ya lo pagó. Y nosotros seguimos adelante.

Así que sí, mi mamá está preocupada. Pero también está tranquila. Porque el sistema funciona. Porque el modelo tiene sentido. Y porque cada cliente que alquila, incluso si no devuelve, confirma que estamos resolviendo una necesidad real.

Publicado por LRM Trajes · Agosto 2025